CARACTERÍSTICAS DEL PATEO
| Fecha de la ruta | Abril-2021. |
| Distancia | 7,3 kms. |
| Tiempo empleado | 4 h. (con paradas, desayuno y fotos). |
| Trazado | Lineal y circular. |
| Comienzo | Mirador en carretera Pruna-Algámitas. |
| Final | Lugar de origen. |
| Dificultad | Fácil. |
| Recomendación | Se puede hacer con niños. |
| Ruta en wikiloc | Descargar |
Entre Pruna y Algámitas, justamente en el Km 8 de la carretera SE-9225 existe un aparcamiento en un lateral de la carretera, el cual es realmente un mirador. En el mismo se encuentran estos dos carteles informativos y...
... y esta magnífica vista, bueno... hoy no.
Tras andar unos metros por la carretera, desde el aparcamiento en dirección Algámitas, nos encontramos con este desvío que nos introducirá de lleno al encuentro con nuestro principal objetivo del día de hoy. Hemos de decir que la fémina que hoy nos acompaña se inicia en este rollo del senderismo y esperamos meterle el veneno en el cuerpo. Viene un poco desconfiada con sus posibilidades pero estamos seguros que superará.
Como podemos ver en esta foto, con barro tiene que ser esta subida un posible tobogán. Esta primera parte es la que tiene más desnivel.
Controlando al ganado. Mirada arriba...
... mirada abajo.
Mucha niebla, y algo de viento, en el día de hoy. Aprovechamos claros de nubes para hacer fotos.
La subida es cortita aunque intensa. Sólo hemos tardado 20´, descansando algo para tomar aire. Ahí tenemos el pluviómetro, actualmente en desuso.
Vislumbramos la otra vista desde la Sierra del Tablón, la cual nos acompañará toda la parte de ida al pico del Terril.
Ya se le ve más relajada. Ha ido pensando que toda la ruta sería como el primer tramo, ja, ja, ja.
El sendero es fácil de seguir ya que está muy pisado.
Tan pisado que hay varios senderos posibles para seguir. Aquí podemos ver que cada uno ha cogido por el primero que han visto, una por arriba siguiéndome a mí, y los otros por otro sendero de abajo. Da igual, ambos llevan al mismo sitio.
La pena que llevamos es que no podemos apreciar la vista que esperábamos aunque tenemos esta otra, que no está nada mal.
Aquí mola más.
Los cambios de luces impresionan.
El vientecillo cambia las vistas por momentos.
Siempre vamos en suave ascenso. Desde aquí se debería ver perfectamente la Sierra del Pinar, pero hoy no.
Vamos encontrando marcas por el sendero aunque a nosotros nos gusta más los hitos.
Un claro, una foto. Parte de Pruna.
Nuestra foto "protesta". No aprendemos ni con pandemia.
A más altura más nos metemos en las nubes.
Algunos obligan a parar para desayunar. Viendo lo que han traído, me da a mí que éstos no han venido a patear... ja, ja, ja.
Me adelanto y hago esta toma hacia atrás, donde se ve el camino de ida (izquierda) y el de vuelta (derecha) que tomaremos un poco después.
Hacia adelante ya vemos el vértice geodésico (más información) que nos indica el punto más alto de la provincia de Sevilla, el Terril con sus 1.129 msnm (más información).
Superando los últimos metros a la cumbre.
En la parte trasera se pueden vislumbrar las magníficas vistas, ja, ja, ja.
Alguno ha encendido la antiniebla, ja, ja, ja.
O cambias de palo o de móvil. Lo único bien enfocado es tu mano, churrita. Ja, ja, ja.
Vámonos que va a empezar a llover. Ilumínanos con tu frontal.
En la vuelta nos hemos parapetado un poco porque ha empezado a lloviznar. Mirando hacia el Terril vemos que otra gente ha encumbrado después que nosotros.
El pronóstico no daba agua, ja, ja, ja. Por eso hay que estar siempre preparado.
En este hito giramos hacia la izquierda. Vamos pateando por lo que sería la cresta de la Sierra del Tablón pero la climatología no nos deja ni ver paisaje ni hacer fotos. Otro día será. Cosas de la montaña.
Nos recuerda a "Gorilas en la Niebla", ja, ja, ja. El humor que nunca falte.
Llegados a este punto necesitamos hacer un parón para explicar algo. A la sierra siempre hay que ir preparado para cualquier imprevisto. O te equipas convenientemente o vas acompañado de...
... especímenes como éste. Solemos optar por lo segundo. ¡Nos ahorramos una pasta, ja, ja, ja! Y nos sentimos taco de seguros, ja, ja, ja. Un abrazo compi. Ya lo veías venir cuando te hice la foto, ja, ja, ja. Lleva más cosas colgadas que un puestecillo de feria, ja, ja, ja. Un tío preparado.
Seguimos hacia una caseta de chapa, que no sabemos muy bien qué pinta ahí pero que está.
Una mirada atrás. Magníficas vistas a derecha y a izquierda, ja, ja,ja.
A partir de aquí empieza la bajada hacia el pluviómetro que pasamos anteriormente.
En la bajada podemos fotografiar algo. Olvera con su castillo al fondo y Pruna con el suyo más cerquita.
Ermita de la Pura y Limpia Concepción (más información).
Mirador-aparcamiento, donde hemos dejado el coche.
No podemos apreciar nada nítido más allá de los Tajos Lagarín y Las Grajas en El Gastor. Una pena. Otro día será.
Bajando con fuerte pendiente.
El pluviómetro. Ya vemos más gente pateando por estos lares. Lo esperado a esta hora.
Una mirada atrás a la bajada.
A partir del pluviómetro la ruta vuelve a ser lineal al tener que pillar nuevamente el sendero de ida. Salimos justo a este punto de la carretera.
Y ahí tenemos a la fémina de hoy más feliz que unas castañuelas de haber terminado con éxito esta ruta, ja, ja, ja.
El Peñón de Algámitas, nuestra anterior ruta en la provincia de Sevilla.
Con esta foto damos por concluida esta ruta.
Otra vez desenfocados, ja, ja, ja. Bueno, tu mano... no, ja, ja, ja, ja, ja.
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