miércoles, 11 de enero de 2012

05ª Ruta: Arroyos Descansadero-Ahijadero.

NOTA INFORMATIVA: Las fechas y horas reflejadas en las fotos son las que recoge la cámara en el momento del disparo, es decir, las reales de cuando se realizó la ruta. Si haces click en las fotos se ven a mayor tamaño.



CARACTERÍSTICAS DEL PATEO
Fecha de la ruta Marzo 2012
Distancia 6,4 kms. (si empiezas y terminas en Llanos del Campo)
Tiempo empleado 5 h. (con paradas, fotos,sin prisas, empezando y terminando en
Benamahoma y, sobretodo, con niños)
Trazado Circular
Comienzo Benamahoma (Salida a Grazalema)
Final Lugar de origen
Dificultad Fácil
Con niños Muy recomendado

.

*Esta ruta está realizada en dos días diferentes (se puede comprobar en las fechas de las fotos) porque en el primer intento nos cogió lluvia y decidimos volvernos por la carretera justo cuando habíamos realizado la parte del arroyo Descansadero. Por ese motivo, para calcular el tiempo del recorrido completo, hay que tener en cuenta sólo las fotos de marzo. Además esta vez se unió más gente para realizarla.

Empezamos a patear en Benamahoma

Una vez superado el Molinillo del Susto (parte del recorrido que puede verse en la 3ª Ruta). Si miramos hacia atrás, vemos este lugar.


Y si miramos hacia delante vemos este otro, y el camino que hay que coger tras cruzar la carretera.


Pedazos de algarrobos, a la izquierda del sendero, tras cruzar la carretera.


Más adelante nos encontramos con este cartel informativo, y lo que queda de una antigua calera. Bastante interesante las explicaciones del cartelillo.



Esta fuente siempre tiene agua o, por lo menos, yo nunca la he visto seca.





Vamos caminando paralelo a la carretera pero pisando campo y no asfalto. Pasamos este arenero antiguo, situados a la izquierda del sendero.




Pasamos estos dos álamos blancos...



... y nos encontramos con esta cancela-angarilla, que hay que cruzar. Tras cruzarla se cierra. Todas las cancelas, angarillas, puertas, etc. que nos encontremos por nuestras rutas hay que cerrarlas, para que los animales que estén en los cercados no se puedan salir de los mismos. Cogemos el carril de la derecha.



Rama de quejigo con helechos sembrados en la misma. Todo hecho por la naturaleza sin la mano del ser humano, ni de otra mano. ¡Esa es mi Naturaleza!.



¿Quién dijo que el campo en invierno está falto de colorido?. Se pueden observar las nubes amenazantes.


Las ramas de estos quejigos parecen que van a trincar a todo aquel que pase por el camino.


En el camino nos encontramos con esta piedra.
¿A que este quejigo trinca a Javier?.

 


Destacar en esta foto el banquito de piedras, que han colocado en el camino, para admirar el paisaje y el único pinsapo que hemos encontrado en la ruta.


Los colores de nuestra ruta.


El camino va siempre en ascenso, aunque muy suave. Cogemos una salida, a la derecha, llegando a la zona llamada El Tesorillo (son pocos metros de desviación y merece mucho la pena). En este lugar se pueden observar varios quejigos hermosos, y eso que, en esta foto, no se aprecia realmente cómo es éste, a pesar de ese tronco enorme,...


... pero en esta otra, la cosa varía, ¿verdad?.


Y en estas ni te cuento lo bien criado que está.



Cabreriza, actualmente abandonada.



Cartel explicativo del Quejigo.


Siguiendo ese camino se llega al área recreativa denominada Los Llanos del Campo.


Volviendo sobre nuestros pasos nos encontramos otra vez en el camino de subida.


No nos pudimos resistir tomar esta imagen.


Por este lugar tenemos que pasar ahora.


Pues ya estamos pasando.


La senda nos lleva hacia la derecha y sube un poquitín siendo difícil perderla.

 

Salimos a la carretera por esta angarilla (¿qué es una angarilla?) y aquí termina la parte que discurre paralela al arroyo Descansadero.


No te despidas Mariquilla que aún te queda un buen rato de pateo para terminar la ruta.



Cruzamos la carretera y nos adentramos en esta parte de la ruta por esta puerta, que no sabemos cual sería su nombre técnico y que es la primera vez que vemos una de este tipo. Agradecería que si alguien sabe cómo se llama y porqué se ponen de este tipo y no una angarilla de toda la vida, nos lo aclarara en los comentarios.



Es curiosa la puerta, ya que siempre está cerrada por el propio peso, al estar colgada del bastidor, de la reja. Bascula hacia arriba por presión y no tiene ningún tipo de pestillo o traba  que impida abrirla.



En este punto empieza la segunda parte de la ruta, exactamente la del arroyo Ahijadero, motivo por el cual hemos realizado la ruta de nuevo.



Tras pasar la puerta hay que tirar por este gran camino " to tieso palante".


A nuestra derecha podemos ver la sierra de la Silla y por delante de la misma el cerro de las Cuevas.


Se llama de la silla porque parece una silla de montar a caballo.


Se acabó el jolgorio, se acabó la juerga, todos callados y andando más ligeros que nunca en toda la ruta y sobretodo más pendientes... de la vaca. Ja, Ja, Ja.


La vaca me mira a mí pero en el grupo, todavía, alguien mira a la vaca.


Esta foto parece que el más alto está rezando y el más pequeño del grupo se ha emocionado y la realidad es que les está dando el sol de cara y no pueden aguantarlo para que les haga una foto. Unos metros antes de llegar a la nave del fondo se toma un camino a la izquierda. Esta nave es la misma que dejamos a la derecha cuando pasamos por el grupo de vacas anteriores.


Amén y cogemos el camino.


Este es el camino y a su izquierda nace el arroyo Ahijadero según los mapas.


Buen ejemplar de bicho.


¡Ea! Todos a lo alto del quejigo.



Pasamos por estos eucaliptos.



Llegamos a un lugar donde salen dos caminos y cogemos el que nos baja por una pendientita.


Vista del Torreón majestuoso.


Cruzando por este lugar nos equivocamos de camino, ya que pasamos a la izquierda del cauce seco del  Ahijaero y vamos directo a la fuente Gorito y a Tavizna por este lugar. Nosotros vamos hacia los Llanos del Campo a través del LLano del Berral.


En el camino equivocado esperando a los rezagados, y tras la siguiente foto nos damos cuenta que no vamos   bien y nos volvemos por donde hemos venido.



Ya encarrilados de nuevo y siempre hacia delante por un sendero bastante llano. Lástima la falta de lluvia que no nos deja empaparnos del verde del campo en esta época del año. Aquí tenemos a Vicente que está hecho un jabato pateando con ese pedazo de bastón rutero.



¿Hay alguien ahí?


¿Algún enano del Bosque? 


Esta parte de la ruta es muy bonita.





A partir del final de la praderita anterior, donde normalmente hay una charca, aunque ahora no exista, se tira por el camino hacia abajo y ya estamos más cerca del final de la ruta.


Estas cabras vienen pateando en sentido contrario.





Estamos dentro de lo que se se llama un helipuerto y es donde los bomberos aparcan el helicóptero cuando hay alguna intervención forestal. La flechas nos señalan el círculo que, desde el helicóptero, se ve para poder aterrizar. Está justo en un lugar llamado Llano del Berral.

Seguimos pasito a pasito y el sol, a pesar de la época del año, ya pica bastante.


Aquí estamos en el final de la ruta, o sea, los Llanos del Campo. Como se puede observar, por los coches aparcados, es un lugar donde los fines de semana se llena para pasar con la familia, y amigos, un día de esparcimiento. A nosotros todavía nos queda llegar a Benamahoma, pero ya es todo hacia abajo.


Caras cansadas del grupo.


Y esta carretera es la entrada de Benamahoma. Aquí damos por concluida la ruta y hasta la próxima.


Ruta desde el cielo.



4 comentarios:

  1. Buena ruta Pacorrillo, por fin la terminaste. Una sugerencia: añadir a las rutas que hagas un pequeño mapa de las mismas. Hasta pronto.

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  2. Estamos trabajando en ello. Un saludo.

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  3. Me ha gustado mucho la entrada. Conociendo parte de la ruta, he disfrutado de las fotos. Salu2

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  4. Dorita/Alh.:
    Gracias por comentar y ápúntate para hacer la parte que no conoces. Un saludo.

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